Al
cierre del año 2010 se registraron 3708
casos de
violencias contra jóvenes de los cuales,
51,34%
correspondían a violencia social. El gobierno
a través de sus
distintos órganos solía
entregar anualmente la tasa de
violencia en la
población infantil, sin embargo desde hace
7
años el silencio reina y la única
herramienta disponible son
proyecciones o estimaciones. De
este modo, se obtiene que el número
aproximado de
muertes en menores de 18 años es de 100 cada
mes.
Aunque de por medio hay un vacío representado en
las "cifras
negras", es decir aquellas que no se
denuncian por diversos motivos,
se conoce que el 90% de
estos casos queda
impune.
Oscar Misle,
director
de Cecodap,
aseveró que esta
es una "realidad
escabrosa", sin embargo la muerte de
niños,
niñas y adolescentes se toma como algo cotidiano.
En
ese sentido alertó que la violencia social ha
pasado de la calle a
los hogares y a las escuelas.
"Cerramos el 2011 enlutados por casos de
agresiones,
violaciones y torturas contra niños. La
sociedad
venezolana está enferma, por lo que son
necesarias políticas
públicas integrales e
integradas entre la casa, la escuela y
la
comunidad.
La
tendencia, según
Misle no avizora una solución
al problema.
Señala
que Cecodap atiende
a
80 centros educativos públicos y privados, “hay
una gran
demanda que hace cuatro años no estaba
presente y ahora se denuncia
4 casos a diario”. No
habla únicamente de la cantidad sino de
la intensidad
con la que se presenta el problema. Es difícil
conocer
las cifras negras, pero se deduce que son mayores a
las que
se
denuncian.
(6to
Poder,
pp. A6, 04/03 –
Luis
Toscano)
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