Heiber Francisco Martínez Leal, de 6 meses de edad; Nancy Teresa García, de 12 años; Howilet Guevara, 4 años; Yelselis Hidalgo Monge, de 8 años; Aarón González, de 2 años; Daisbel Colmenares, de 16 años; Darnuis Silva, de 13 años, y María Alejandra Rojas González, de 18 meses de edad. Todos ellos tienen algo en común: perdieron la vida cuando apenas comenzaban a conocerla, al convertirse en víctimas de la violencia y la inseguridad que vive el país.
En el más reciente informe de Cecodap se señala que en Venezuela murieron de manera violenta 400 niños, niñas y adolescentes. En 237 de los casos (59,2% de la cifra) la causa específica fue la violencia social, según un registro hemerográfico hecho por la organización entre septiembre de 2006 y agosto de 2007.
En el informe de la referida ONG también se afirma que los últimos datos oficiales en cuanto al tema fueron publicados en el anuario 2005 del Ministerio de Salud (el último que se hizo), en el cual se informa que 1.207 personas, con edades comprendidas entre los 0 y los 19 años, fueron asesinadas por ahorcamiento y disparo de arma corta, arma larga o de otras armas de fuego. Además se expresa que el grupo más vulnerable es el de edades entre 15 y 19 años, y de sexo masculino.
(El Nacional, pp. C-2, 09/12 – Thábata Molina)
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